~ Recuérdame cuando duermes y adivino lo que sueñas, cuando lejos de nuestra cama es a mí en quien piensas.
Recuérdame cuando parta y no regrese a nuestra casa, cuando el frío y la tristeza se funden y te abrazan.
Recuérdame cuando mires a los ojos del pasado, cuando ya no amanezca en tus brazos. Y que seas invisible para mí, para mí.
Recuérdame amándote, mirándote a los ojos, atándome a tu vida. Recuérdame amándote, esperándote tranquila, sin rencores sin medida. Recuérdame que mi alma fue tatuada en tu piel.
Recuérdame cuando sientas que tu alma está inquieta. Si el deseo y tu amor no me calientan. Recuérdame.
martes, 6 de octubre de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)












No hay comentarios:
Publicar un comentario